JORNADA DE LA FAMILIA 2009.
6/6. CONCLUSIÓN: CRECER EN FAMILIA.
En estas fechas navideñas, ponemos la mirada y el corazón en María y José, a quienes el Padre encomendó la misión de ser los primeros maestros de la educación humana del Verbo encarnado. En su hogar santo, “el niño iba creciendo y se fortalecía, lleno de sabiduría, y la gracia de Dios estaba con él”.
Queremos alentar a los padres, que, a ejemplo del hogar de Nazaret, están construyendo sus familias como Iglesias domésticas. En medio de las dificultades, los sacrificios y los obstáculos, cuentan con la gracia que recibieron en el sacramento del Matrimonio para educar a sus hijos en la fe y en el amor. ¡No tengáis miedo! El don del Espíritu Santo sostiene y anima los desvelos de los padres que “calan profundamente en el corazón de sus hijos, dejando huellas que los posteriores acontecimientos de la vida no lograrán borrar”.
Queremos alentar a los padres, que, a ejemplo del hogar de Nazaret, están construyendo sus familias como Iglesias domésticas. En medio de las dificultades, los sacrificios y los obstáculos, cuentan con la gracia que recibieron en el sacramento del Matrimonio para educar a sus hijos en la fe y en el amor. ¡No tengáis miedo! El don del Espíritu Santo sostiene y anima los desvelos de los padres que “calan profundamente en el corazón de sus hijos, dejando huellas que los posteriores acontecimientos de la vida no lograrán borrar”.
FUENTE. SUBCOMISION PARA LA FAMILIA Y LA DEFENSA DE LA VIDA. CEE.
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